Adicción Noticias

Carsten Holler: llegan a México sus instalaciones

tamayo

El artista belga Carsten Höller, conocido por sus instalaciones conceptuales a gran escala que sirven como experimentos, llega por primera vez a la Ciudad de México con la exposición Sunday, en el Museo Tamayo de Arte Contemporáneo.

Con un entrenamiento profesional como entomólogo, Höller crea laboratorios, que invitan al espectador a explorar sus estados emocionales y psíquicos. Sus preocupaciones centrales se relacionan con el comportamiento humano, el cuestionamiento de la lógica, los estados alterados de la mente y la percepción.

Höller ha descrito sus propias obras como “máquinas de confusión”; además, el propio artista es un personaje algo confuso. Nacido en Bélgica, se formó como agrónomo en Alemania e investigó la comunicación olfativa entre insectos. Ahora vive en Suecia y evita un estilo que lo límite, al colaborar a menudo con otros artistas y trabajando bajo varios seudónimos.

tamayo1

Conocido por haber introducido una combinación de lo lúdico en el contexto institucional, Höller lleva lo alucinógeno a entrar en contacto con la vida cotidiana, construyendo, por ejemplo, resbaladillas de varios pisos de altura que sirven para evacuar museos o edificios corporativos, o tanques de privación sensorial de polipropileno en los cuales los visitantes flotan. Para esta exhibición, el artista hace uso de la arquitectura del edificio (cuyo diseño se basa en las pirámides prehispánicas) para realizar la pieza “Decision Tubes”, una estructura en red y metal, suspendida sobre el espacio central del recinto, que permite al visitante “deambular por encima del suelo, constantemente enfrentándose a decisiones de qué camino tomar y qué decisión tomar”, de acuerdo con Baldo Hauser, uno de sus seudónimos.

Sus proyectos de gran escala refieren al placer de visitar parques de diversiones. En Sunday, Höller continúa entrelazando lo familiar con lo ilusorio, a fin de elevar sus instalaciones experenciales a un nivel de psicodelia. Un ejemplo de esto, es la nueva versión de “Upside-Down Goggles” (1994), una herramienta de desorientación y alienación que estará disponible para que los visitantes recorran el museo.

Su experiencia como científico destaca también en sus instalaciones tecnológicamente complejas que incorporan regularmente edificios, iluminación y juegos de computadora.

Finalmente, Carsten rehízo “Two Roaming Beds” (2015), pieza que invita al público a pernoctar en el museo en dos camas que deambulan por la sala a lo largo de la noche. Los dos huéspedes se lavan los dientes con una pasta que hace que tengan regresiones vívidas durante su sueño, dirigiendo éstos hacia su infancia, su lado femenino o masculino.

Con información de: https://heraldodemexico.com.mx/artes/carsten-holler-llegan-a-mexico-sus-instalaciones/